El Huracán Matthew alcanzo las Bahamas el día 6 de octubre, acrecentando la preocupación de que pudiese devastar las áreas más pobladas de la nación.

El huracán causó daños graves en diversas infraestructuras, aunque no se ha señalado ningún fallecido. La isla de Grand Bahama fue la más afectada.

Matthew estaba clasificado como una tormenta de categoría tres a su paso por las islas centrales de Bahamas, y trajo consigo inundaciones, fuertes lluvias y vientos.

La tormenta había sido clasificada como Categoría Cuatro anteriormente, a su paso por Haití, pero tras dejar Cuba y desplazarse hacia el norte perdió fuerza.